Envenenando a quien se quede
tráslucida,
escurridiza,
quisiera ser medusa,
con largos tentáculos
creando una carcel hermosa y transparente
dando muerte lenta y dolorosa
sin poder pensar,
sin poder recordar
infinitamente primitiva
bailando en aguas saladas
creadas por mi,
Fría:
no sentir,
no saber a donde ir,
blanda
yéndome aún más lejos
iluminando el agua de mis lágrimas
con la ignorancia de tu presencia
capricho de vida sin corazón
abrazandote,
matándote
sin saber quien eres
sin sentir nunca más.