domingo, 13 de junio de 2010

Lo que una vez tuve.



Es imposible decir que todo ha sido casualidad.

No encuentro la manera de explicarte la metodología de la situación, ni siquiera tiene lógica.

Todo tiempo tiene su lugar, y aunque estás dentro de mi, estoy ajena de tu recuerdo, que se convierte en aire.

Llevas mi razón contigo y quedo indiferente ante tu fantasma.

Vas y vienes con tus argumentos, durmiendo con pesadillas alternas a sueños dulces que dejaste ir.

El reloj corre con horas de diferencia y la nieve que hierve llega a mis rodillas.

Estoy esperando con las manos heladas y una sorpresa en los labios.

Aún no se lo que espero, las mariposas negras han invadido la casa y hay alguien que me grita desde allí.

Las ilusiones duran lo que una burbuja.

Los verdaderos amores duran lo que un infierno.

Las ovejas se convierten en lobos.

Todo lo que quiero es sumergirme y olvidar todo lo que una vez tuve.